La Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL) y el Hay Festival of Literature & Arts han sido galardonados con el Premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades 2020. Para el jurado, la FIL y el Hay Festival merecen el premio porque representan “los más importantes puntos de encuentro del libro, los escritores, los lectores y la cultura en el mundo” y contribuyen decisivamente “a fortalecer las industrias culturales y a hacerlas sostenibles”.
El galardón llega en un momento de incertidumbre, con la mayoría de las ferias del libro y festivales culturales cancelados, y reconoce a las dos instituciones como herramientas complementarias en la industria del libro: la FIL Guadalajara por ser mayor mercado profesional para las editoriales en lengua castellana, y el Hay Festival por significar el encuentro con los lectores.
La FIL de Guadalajara nació en 1989, por iniciativa de la Universidad de Guadalajara, en Jalisco, y como una réplica de la Feria del Libro de Fráncfort, que funcionaba como el gran mercado editorial del mundo desde 1949. En la actualidad, la FIL es la segunda feria del libro más grande del mundo, después de la alemana, y la primera en lengua castellana. En la pasada edición reunió a 2.400 editoriales de 45 países y recibió a 800.000 personas.
Este año debería realizarse del 28 de noviembre al 6 de diciembre, con Sharjah (Emiratos Árabes Unidos) como invitada de honor, pero Marisol Schulz, directora de la FIL, no puede precisar si se realizará la edición número 34. “Estamos en un momento de incertidumbre; aún es prematuro poder confirmar cómo se va a celebrar la próxima edición. Estamos valorando distintos escenarios, dependiendo de las medidas sanitarias que haya que tomar de aquí a diciembre, y sobre todo, de la agenda internacional. Aún no sabemos quién podrá viajar y quién podrá participar”, aclaró Schulz.
El otro galardonado, el Hay Festival, nació como un pequeño encuentro en la ciudad de los libros, Hay-on-Way, una localidad galesa de unos 1.800 habitantes y repleta de librerías de libros usados. Uno de los libreros locales, Peter Florence, inventó en 1988 un festival literario basado en la conversación informal entre autores y lectores. Con el tiempo, el festival que Bill Clinton rebautizó como “el Woodstock de la mente” fue ampliando su ámbito de actuación a la música, al cine, al pensamiento, los derechos humanos, el periodismo, la ciencia o la tecnología. Desde 2006 se ha extendido con ediciones en Segovia (España), Cartagena de Indias (Colombia), Querétaro (México) y Arequipa (Perú), entre otras ciudades.
Celebrado anualmente durante 11 días a finales de mayo y principios de junio, la edición en Gales de este año concluyó recientemente íntegramente en formato digital. Cristina Fuentes La Roche, directora internacional del Hay Festival, considera que el festival en Querétaro (3 al 6 de septiembre) probablemente sea virtual. Tal vez el de Segovia, también en septiembre, pueda ser presencial, como el de Cartagena de Indias, a fines de enero de 2021. “La crisis va a cambiar definitivamente la forma de hacer festivales –advierte Fuentes La Roche-. Las tecnologías nos permiten que gente de todo el mundo que quería venir y no podía, ahora pueda por primera vez participar de la magia de la conversación”.
El Premio Princesa de Asturias está dotado con una escultura de Joan Miró, un diploma, una insignia y 50.000 euros. Veintiocho candidaturas de 15 nacionalidades optaban al galardón de Comunicación y Humanidades de 2020. Se trata del tercer premio de este año que se da a conocer. Antes de Morricone y Williams, el Princesa de Asturias de la Concordia reconoció a los sanitarios españoles que se han enfrentado desde la primera línea a la pandemia mundial de la covid-19.