Garcilaso de la Vega (1539-1616), más conocido como Garcilaso El Inca, fue un escritor e historiador peruano, hijo del conquistador español Sebastián Garcilaso de la Vega y de la princesa incaica Isabel Chimpu. Gracias a la posición de su familia, recibió una esmerada educación y se trasladó a España para dedicarse a su carrera militar, que finalmente quedó truncada por su condición de mestizo.

Inspirado por sus ilustres antepasados – Garcilaso de la Vega, Jorge Manrique o el marqués de Santillana-, se interesó por la religión y los textos clásicos y comenzó a frecuentar los círculos humanísticos de Sevilla, Montilla y Córdoba. El estudio de las letras y de los poetas renacentistas le llevó a traducir Diálogos de amor, de León Hebrero, y acercar el texto a la lengua y la cultura española.

Siguiendo estas corrientes, Garcilaso El Inca se aventuró en un proyecto historiográfico centrado en el pasado americano, especialmente de su país natal, Perú. La obra, finalmente titulada La Florida del Inca, contiene la crónica “de oídas” de la expedición del conquistador español Hernando de Soto, que el Inca pudo escribir gracias a los testimonios de los acompañantes y otras fuentes. Aun así, su título más conocido es Comentarios reales, que repasa la historia del Imperio Incaico y narra otros procesos colonizadores.

Desde el punto de vista literario, el autor es una referencia inexcusable en la formación de una tradición literaria latinoamericana.