Este viernes 8 de abril, la Asociación de Editores de Madrid ha entregado el premio a la librería especializada en literatura infantil y juvenil, Liberespacio, ganadora del II Concurso de Escaparates PORQUE #YOLEO. Este evento, organizado por la Comisión de Editoriales de Literatura Infantil y Juvenil de la AEM, invitaba a todas las librerías madrileñas a decorar sus vitrinas y establecimientos, inspirándose en el poema Las historias nos ayudan a remontar el vuelo, de Richard Van Camp.
Para el concurso, la librería Liberespacio ha llenado su escaparate con multitud de piezas móviles que parten de un libro troquelado y se erigen hasta el techo del establecimiento, sujetas por varios hilos. Entre ellas, hay páginas de libros en forma de pájaros, pequeños cuadernos, nubes y otras ilustraciones. Con esta decoración, Liberespacio ha querido mostrar todo lo que nace y crece de la lectura, de las mismas páginas de un libro, que nos invita con sus historias a volar más alto y a seguir soñando con otros mundos.
La coordinadora de la Comisión de editoriales de Literatura Infantil y Juvenil de la AEM, Maite Malagón, y el Secretario General de la organización, Javier López, han hecho entrega del premio: un cheque dotado de 1000€ y una lámina del escaparate realizada por la ilustradora Andrea Reyes.
Durante el evento, Maite Malagón ha ensalzado “el importante trabajo que las librerías independientes llevan a cabo en el fomento de la cultura y el hábito lector, en este caso entre el público más joven”. Por su parte, Zaida Pérez, dueña de la librería Liberespacio, ha estimado la labor tan necesaria de estas iniciativas que ayudan a visibilizar y a dar voz a las librerías más pequeñas.
El acto se ha cerrado con una fotografía de los organizadores y los premiados en el escaparate de la librería. Esta segunda edición del concurso, que fue convocado para celebrar el Día Internacional del Libro Infantil y Juvenil, ha valorado la originalidad de la propuesta de Liberespacio y su carácter metafórico: no dejemos de leer, y menos cuando somos pequeños, porque al abrir un libro la imaginación, el conocimiento y los sueños vuelan, crecen y nos hacen crecer.